UN TÍO CON ARTE
BERLIN (Reuters) - Un joven alemán que fue atrapado robando una tienda intentó engañar a la policía mintiendo sobre su domicilio, pero terminó con más problemas cuando la dirección que entregó resultó ser la de un agente que investigaba el caso.
El joven de 18 años y con residencia en Achim, un pueblo de 30.000 habitantes del norte de Alemania, admitió su mentira cuando el oficial le explicó que esa era su dirección, dijo la policía Verden.
"Fue una coincidencia", señaló un portavoz policial.
"El ladrón dio la dirección porque alguna vez vivió en esa casa. El agente fue quien se mudó allí después", destacó.
Comentarios