UNA ESPAÑA LAICA
Me comenta un follonero habitual del blog que ha escuchado noticias o rumores de que el gobierno español se está planteando negociar una modificación del texto constitucional para eliminar del mismo los artículos relacionados con la iglesia católica, es decir, intentar que el Estado sea totalmente laico, al estilo francés. Hay que diferenciar ese sentir galo cuasi-anti-religioso de los principios de cooperación, libertad e igualdad religiosa que imperan en la constitución: las personas o grupos tienen derecho a tener su religión propia y a no ser discriminados en su uso. Esto no tiene nada que ver, por supuesto con que España sea un país aconfesional, es decir, que ya no procede decir "la nación española es y siempre será católica, apostólica y romana..."
Entiendo que no se puede negar el cariz de fe que todos los españoles de a pie poseemos; no se puede negar una realidad social, de un imbricado y complejo sistema donde conviven 4 religiones "mayoritarias" como son la católica, la judía, la musulmana y la evangélica junto con otras no reconocidas por el Estado por diferentes razones (entre otras, que algunas de ellas parecen sectas o vulneran el orden público).
Si el Sr. Rodríguez se decide a abanderarse de esta cuestión va a encontrar más palos que apoyos y no precisamente de la conferencia episcopal española o la sobrina del Cardenal Rouco Varela, sino del pueblo llano. A la gente lo que le interesa es llegar a fin de mes y a duras poenas llega, por lo que el gobierno debería centrarse en lo realmente importante y dejar de intentar integrar los objetivos de la izquierda más radical en su política socioeconómica. De lo contrario Rodríguez será un nuevo Azaña, pero en menos. Y tras D. Manuel Azaña ya se sabe lo que vino...
Entiendo que no se puede negar el cariz de fe que todos los españoles de a pie poseemos; no se puede negar una realidad social, de un imbricado y complejo sistema donde conviven 4 religiones "mayoritarias" como son la católica, la judía, la musulmana y la evangélica junto con otras no reconocidas por el Estado por diferentes razones (entre otras, que algunas de ellas parecen sectas o vulneran el orden público).
Si el Sr. Rodríguez se decide a abanderarse de esta cuestión va a encontrar más palos que apoyos y no precisamente de la conferencia episcopal española o la sobrina del Cardenal Rouco Varela, sino del pueblo llano. A la gente lo que le interesa es llegar a fin de mes y a duras poenas llega, por lo que el gobierno debería centrarse en lo realmente importante y dejar de intentar integrar los objetivos de la izquierda más radical en su política socioeconómica. De lo contrario Rodríguez será un nuevo Azaña, pero en menos. Y tras D. Manuel Azaña ya se sabe lo que vino...
Comentarios
Cuando la Iglesia se convierte en un negocio histórico malo.
Cuesta (PSOE) espera que se impulse la "laicidad positiva" y ve "infundados" y "caducos" los temores del PP
MADRID, 8 May. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Comisión de Justicia del Congreso y miembro de la Ejecutiva Federal del PSOE, Alvaro Cuesta, expresó hoy su "plena satisfacción" por la decisión del Gobierno de acometer una reforma de la Ley de Libertad Religiosa y confía en que sirva para impulsar la "laicidad positiva". Al mismo tiempo tachó de "infundados" y "caducos" los recelos del PP, que teme que esta modificación se utilice para legislar contra la religión católica.
Cuesta, uno de los representantes del sector más laico del PSOE, saludaba así que el Gobierno haya recuperado una iniciativa que los socialistas habían barajado incluir en su programa electoral para las elecciones generales, pero que finalmente se quedó fuera.
En declaraciones a Europa Press, el secretario de Política Municipal del PSOE explicó que se han "detectado ciertas disfunciones en la ley vigente", que data de 1980. "Después de más de 28 años de aplicación, es lógico que se introduzca una corrección para adaptar la ley desde el perspectiva de lo que es la laicidad positiva y siempre impulsando el principio de libertad religiosa", argumentó.
Además, aprovechó para replicar al portavoz del PP en la Comisión Constitucional del Congreso, Federico Trillo, quien ayer expresó su sospecha de que el Ejecutivo use esta reforma para legislar "contra determinadas creencias", en concreto contra la religión católica.
NEUTRALIDAD Y PROMOCIÓN DE LIBERTADES, NO DE PRIVILEGIOS.
En opinión de Cuesta, las palabras de Trillo "son el símbolo de una parte de la derecha española que sigue sin entender lo que es el principio de laicidad positiva", un concepto, recordó, acuñado por el Tribunal Constitucional.
Con el objetivo de que este principio quede claro y nadie lo tergiverse, Cuesta recalcó que la "laicidad positiva" busca impulsar "la neutralidad del Estado frente a las religiones y su papel activo en la promoción de la libertad religiosa y no de los privilegios".
Por ello, aseguró que los temores de Trillo "son manifiestamente infundados". "Rozan no sólo la infundia premeditada sino también un planteamiento ya caduco que es impropio de nuestro sistema constitucional", dijo. "Y es que nuestro Estado no es un Estado confesional", remachó el dirigente socialista.
Lo que está pasando es que la gente será borrega pero no idiota. Sabemos lo que está pasando. Sabemos que estamos hartos de que se vayan sucediendo unos y otros y todo sea lo mismo. Y en nuestro interior sabemos qué está bien y qué no. Sabemos que está mal discriminar a la gente por razón de físico. Sexo. Religión. Raza. Por obligar sobre cómo quieres morir. Está mal imponer. Está mal no dialogar. Está mal hablar y decidir por los demás. Está mal asfixiar a la gente de a pie y esclavizarnos en favor de unas leyes (muchas) absurdas y de un régimen falsocrático aún más nulo. Está mal obligar a nos hacer determinadas cosas, y más cuando no cumples lo que pregonas. Está feo, feísimo, manipular la información de la historia, de las mentes, y de los corazones de la gente. Está mal inculcar el miedo al ser humano en general, y en concreto a los niños. Está mal jugar con la fe de la gente. Y así hasta mil...
Resulta que todo esto que os expongo, lo tienen los políticos en un 80%, y la Iglesia en un 100%.
Mi idea pues, está clara. Mientras que la Iglesia no sea verdaderamente HUMILDE, como se le supone, y abandone todos estos puntos deleznables, el 20% del político sincero debe mantenerla QUE NO EXCLUIRLA POR SIEMPRE, al margen de una sociedad que busca avanzar socialmente.
No soy un experto en la materia pero como en casi todo aplico un poco de lógica. Así, enumero con algunos ejemplos qué significa para mi un pais laico:
- Pues que una niña musulmana no se pueda negar a hacer educación física en el Colegio. Entre otras cosas porque si se le permite que no la haga contribuye más a su aislamiento social.
- Pues que la Iglesia (sea la que sea) se autofinancie y no se beneficie, como hace la Católica, de los mecanismos de recaudación del Estado para ganar dinero.
- Que en los sitios públicos no existan símbolos de una determinada creencia, crucifijos en las escuelas.
- Que la religión sea algo privado del sujeto, que la religión salga de la escuela, debe existir una educación en donde las creencias religiosas no entren.
- Que la religión salga de los hospitales, ¿quién es un sacerdote para estar en el comité ético de cuidados paliativos? Por favor dejemos que los sanitarios trabajen sin esa presión eclesial.
Cada uno que trabaje en lo suyo según su mejor saber y hacer.
Esta entiendo que debe ser la evolución lógica de nuestra sociedad o sino hemos de dotar a las demás religiones de los mismos privilegios que la católica (recordemos que en España hay más de 1 millón de musulmanes que la mayoría rezan en garajes, locales...).
Con respecto a Dios soy agnóstico con tendencia a creer a ratos y con respecto a las relaciones del hecho religioso y político total y completamente laicista.
Sin embargo, debido a batallitas vividas me parece muy cutre el laicismo francés. Siempre dije que los franceses de uno en uno son encatadores, de una en una para qué hablar. Pero como nación... es otro cantar. Como castigo mi hermano me obsequió con una cuñada francesa, que por supuesto es encantadora y un sobrino gaditano-gabacho muy simpático. Y ahí va la batallita: en la misma tarde se casaron por el rito católico (primero) y por lo civil en la casa consistorial. Pues este agnóstico "notoriamente alejado de la fe" según consta en documento parroquial vejeriego tiene que reconocer la SUPERIORIDAD ESTÉTICA Y ESCÉNICA DEL RITO CATÓLICO SOBRE EL SUCEDÁNEO DEL RITO CIVIL FRANCÉS. Convertir el laicismo en otra religión-obligación no es muy atractivo.
Volviendo al tema, no desearía que ningún "chavo" mío fuera a parar a la paupérrima Iglesia Romana, pero igual de poca gracia me hace termine sufragando cualquier campaña de la multinacional o.n.g. profesional Greenpeace.
En Italia, creo, según comenta un colega romano (más liado que la pata de) hasta puedes elegir a qué organización se destina...
SALUD
Pero lo cierto es que por ser ateo o agnóstico no debe negarse la libertad religiosa -de creer o no creer- y sus consecuencias sociales. Es la diferencia doctrinal entre laicismo y laicidad, que supongo no conocerá la mayoría. Una cosa es que el Estado no sea católico o musulmán y otra que se niegue cualquier efecto, consecuencia o derecho a lo religioso.
Desde este punto de vista, la religión no debe tomar partida en ningún aspecto de la sociedad.
ESTADO-EJÉRCITO-IGLESIA: Post-dictudura. Mejor ni lo comento. Atención al último párrafo.
Información extraída de la web www.arzobispadocastrense.com
ACTIVIDADES LITÚRGICAS, SACRAMENTALES, PASTORALES Y SOCIALES:
10. La atención pastoral y ayuda a los no católicos
En el ámbito castrense el ejercicio de la libertad religiosa está reconocido y amparado por el Ministerio de Defensa. Sin embargo, en nuestro caso, debido al bajo número de creyentes de otras confesiones cristianas o no cristianas, el beneficiario del derecho a ese ejercicio es más del individuo que lo profesa que de la confesión religiosa a la cual pertenece.
El gobierno español, para garantizar el derecho a la libertad religiosa, ha establecido un marco jurídico que regula y permite su real ejercicio, estableciendo incluso Acuerdos de cooperación con las distintas confesiones religiosas consideradas de notorio arraigo.
Este es el caso del Acuerdo suscrito con la «Federación de Entidades Religiosas Evangélicas de España», mediante Ley de 10 de noviembre de 1992, y que trata lo relativo a Defensa en su artículo 8º. Sin embargo, el carácter genérico de la citada Ley provoca serias dificultades sobre la prestación del correspondiente servicio religioso evangélico dentro de las Fuerzas Armadas.
La federación evangélica está demandando, junto con otras federaciones religiosas no cristianas como las musulmanas, del Estado español un acuerdo específico en esta materia, con la pretensión de que reproduzca literalmente para su federación confesional el modelo establecido para los miembros católicos. Las dificultades y la improcedencia de esta petición de paridad resultan evidentes.