MONTIEL, EL MALTRATADOR (La Voz - 28-11-10)
MONTIEL, EL MALTRATADOR Este será mi último artículo de opinión. Stop. Mañana vendrá a buscarme la Guardia Civila; la espero con la pistola vacía y el corazón sucio. No pude evitarlo, vino a mí sin esperarla; la ira, el ansia maltratadora. Stop. En prisión no me dejarán usar el Ipad, mi vida será incompleta. No hizo falta juicio, bastó con la denuncia. De hecho me alegro: más de una Magistrada me tenía ya en busca y captura y la cosa hubiera acabado aún peor si hubiera caído en sus zarpas. ¿Mi pecado? Me avergüenza confesarlo, no ha sido otro que pensar. Stop. Me explico. Stop. La berza estaba deliciosa. El chorizo en su punto y la morcilla, negra como el ópalo. Fui a repetir y ella me dijo que no me convenía, que iba a congelarla. Quise matarla, lo reconozco. ¿Cómo puede alguien congelar esa maravilla culinaria, ese plato con el que mi esposa debutó en su día en televisión? Lo dicho, la berza, el ansia. La confesión mental. El resto puede imaginarse con facilidad: saltó la aler