EL REBOTE DE ATAQUE
Muchas críticas recibió Pau Gasol tras el 2-2 de los Jazz por su manifiesta incapacidad para cerrar el rebote defensivo. Okur y Boozer -y Milsaap- atacaron con fiereza el rebote de ataque, cargaban, empujaban, desplazaban y tiraban al suelo una y otra vez al de Sant Boi, que apenas daba crédito a cómo los árbitros lo maltrataban. Tomó nota y el siguiente partido fue otra cosa. Para muestra, un botón: en el 5º partido de la serie se zafa de su defensor turco y coge uno de sus 6 rebotes en ataque para hundir la bola en el aro mormón. Fue la puntilla y la elevación a la categoría de héroe.
Espero que Gasol haya comprendido ya que en la NBA los arbitrajes de play offs son otra cosa y que los colegiados respetan a los pivots duros. Siempre lo he dicho: no se trata de pegar mucho, sino de saber dónde y como hacerlo. Ejemplo palmario: Dennis Rodman, maestro entre maestros del rebote.
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