POTEMOS - La Voz de Cádiz 22-10-14
POTEMOS
Montiel de Arnáiz
@montieldearnaiz
Si algo me gusta de Pablo Iglesias es su inteligencia, su capacidad estratégica de anticipación: es escurridizo en las encerronas y hábil con viento a favor. Pilló a todo el mundo con el calzón bajo tapando bota cuando las elecciones europeas, con su carita de niño travieso impresaen las papeletas. Pese a su talla intelectual y su capacidad de adaptación al medio, patina en lo económico y lo van a machacar por ahí. Non solum: los amigos del powerpointgraciosillo, del vídeo desternillante y el chascarrillo de tasca han calibrado su mirilla sobre Iglesias, posiblemente porque le teman como adversario. De ahí el reenvío viral de su vídeo cantando aparentemente ebrio la “Internacional” junto con un etarra, titulado “Potemos”. Antes, cuando había que cargarse a alguien, le montabas una interviú con una puta en un piso videovigilado; hoy, youtube ofrece el arma de destrucción masiva de incomodidades.
Podemos es un partido joven e inexperto que parece estar sufriendo sus primeros reinos de taifas. Iglesiasofrece su candidatura a la secretaría general mediante primarias abiertas. Otros, entre los que se incluye la gaditana de Izquierda Anticapitalista, Teresa Rodríguez, parecen desconfiar de ese sistema tan propio de las castas que desprecian y buscan un modelo de dirección asambleario. Esto puede deberse a que la figura de Pablo Iglesias, tras comenzar su rueda de entrevistas por los principales platós de España, empieza a tener alturas de líder, de “macho alfa”, permitiéndose, incluso, manifestar que si el PSOE quiere pactar con él tendrá que hacerle Presidente del Gobierno. Este tipo de baladronadas ha preocupado a los partidos “tradicionales” de izquierda, que intuyen pueden ser aplastados por el rodillo de Pablemos. Por eso vemos juego sucio y puñaladas traperas, a Pablo cazado wassapeando mientras conduce, apoyando un Euskadi escindido en una herriko-taberna, o cantandohimnos de otra época, visiblemente afectado. Los partidos políticos despreciarán el champú anti-casta pero no van a cometer de nuevo el error de menospreciar a Iglesias: van a ir a aplastarlo porque sus propuestas son chavistas, dictatoriales, inaplicables. Y seguramente él mismo lesayudará con su actitud egolátrica, su liderazgo personalista y los errores que aparecerán por su juventud y personalidad.
Debemos respetar, sin embargo, a este TyrionLannister coletudo que ha dejado temblequeando al establishment de toda la vida porque, revestido de kilos de demagogia y medias tintas, ha hecho suya la tercera vía, hundiendo partidos y adelantando por la derecha a otros. Seremos testigos de lo que ocurrirá de aquí a mayo del quince y comprobaremos si Pablo Iglesias resiste el sprint final de Pedro Sánchez, Soraya Sáenz y de su propio compañero, el extravagante Monedero. Y lo más importante, veremos si podrá aguantarse a sí mismo.
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