Desgraciadamente la piratería ha vuelto a estar de moda. Y de nuevo, como entonces, los piratas no actúan por su cuenta, sino que lo hacen al dictado de Londres, aunque en este caso en vez de órdenes de Su Majestad las siguen de ciertos despachos de abogados que se hacen llamar “intermediarios”. En fin, lástima que estos piratas no sean como El Temible Burlón. Breve sinopsis: Vallo, el pirata rojo (Burt Lancaster) es un temible pirata que junto con su tripulación interceptan el barco del enviado de su majestad para acabar con una revuelta iniciada por El Libre. De este modo, se hacen con su cargamento de armas que deciden vender a los rebeldes, para después de haber contactado con ellos, entregar el líder rebelde al representante de su majestad, como no, a cambio de dinero. Sin embargo, no todos los planes saldrán conforme a lo previsto, especialmente cuando Vallo conozca a una hermosa mujer… Esta clase de piratas sí que merecen la pena. Aventuras y diversión a raudales. Pocas película...